Ceramica Bevilacqua es un taller artesanal de gestión familiar con sede en el interior de Sicilia, Caltanissetta. Desde 1997, los artistas Antonio y Giuseppe, que también son hermanos, han buscado inspiración en la mayólica siciliana y las decoraciones tradicionales de la isla. Sin embargo, todo su trabajo es extremadamente reconocible y tiene su toque personal. Ánforas, jarrones, platos y relojes son solo algunas de las maravillosas piezas producidas. Todas las creaciones de los hermanos Bevilacqua están dominadas por el amarillo brillante, el azul intenso, el verde esmeralda y el negro profundo, que representan el sol siciliano, el mar, las colinas y la lava en el monte Etna.
La superficie de este frigorífico está claramente inspirada en los colores y los motivos decorativos de los carros de Catania, pintados sobre laca, una técnica particularmente refinada utilizada por muy pocos maestros que alcanzó su mayor esplendor en la década de 1930. Se ilustran las decoraciones barrocas como las hojas de acanto, las máscaras, las águilas y los putti pintados con un fondo en tonos profundos de granate, verde y azul tan típicas de este estilo. Los lados están pintados con un motivo de "mennula" ("almendra" en dialecto siciliano) que divide el espacio en rombos, en el centro de los cuales están pintados los perfiles de los Paladines de Francia, Orlando en un lado y Bradamanteon en el otro. Pintado en la puerta hay un tema mitológico con Apolo y Daphne, cuyo sombreado sutil hace eco de la técnica reservada para los carros más preciados. Un "Paparuni" ("amapola" en siciliano) decora la parte superior, un motivo recurrente en la tradición siciliana que también se recoge en los lados.
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